Escribo este libro porque lo tenía que decir; decir que hay un amor para cada uno de nosotros. Esa persona es tu propia versión, ya sea masculina o femenina, (según sea el caso), porque energéticamente todos somos una sola potencia y una sola energía que emana de la misma fuente, por tanto, estamos relacionados; ya que nuestra naturaleza parte de la misma esencia. Lo que me pasa a mí, te puede pasar a ti, y viceversa.

Ninguno de nosotros está absolutamente exento de nada. Nuestros anhelos y deseos están también plasmados en nuestros complementos, que son las parejas que buscamos y elegimos a lo largo de la vida. Solo que a veces nos confundimos y elegimos estar con alguien por razones diferentes. Ahí es cuando los matrimonios no funcionan; es muy importante poder reconocer a tiempo, cuando estamos en una relación equivocada.

En mi caso, me demoré 8 años en salirme de aquella relación que pensé que era real, a pesar de que las señales que me decían que no lo eran; empezaron a llegar desde los primeros meses de casada. Me aferré a la posibilidad de que algo cambiaría con el pasar de los años.

Pero el tiempo del cambio no llegó, afortunadamente reaccioné y pude rescatar el sueño más grande de mi vida, porque anhelaba tener una familia, en el transcurso de los primeros meses de matrimonio mi exesposo me dijo que no quería tener hijos, y no era porque no pudiera, sino porque no quería, al menos no conmigo.

Esto iba en contra de lo que era mi plan de vida, sin embargo, no le creí y continué mintiéndome a mí misma, con una falsa expectativa de que cambiaría de opinión. Muy pronto me di cuenta de que no sería así, pero para entonces, ya existía en mí el suficiente temor como para no dejarme ir.